Unidos en fe y propósito, miembros de Iglesia Bautista Estrella de Belén se reúnen para orar por sus vecinos, creyendo que la esperanza del evangelio y la compasión pueden transformar su comunidad. Foto por cortesía de Iglesia Bautista Estrella de Belén.
HIALEAH— El compromiso de la Iglesia Bautista Estrella de Belén de establecer metas claras para la evangelización y el bautismo ha conducido a un notable crecimiento y transformación tanto en la congregación como en la comunidad circundante. Al enfocarse intencionalmente en el alcance y el discipulado, la iglesia ha visto un aumento en los bautismos y una pasión renovada por compartir el evangelio.
“Cuando establecimos metas de bautismos, vimos un aumento significativo”, compartió el pastor Javier Sotolongo. “La gente ya estaba ahí, pero por alguna razón, no daban ese siguiente paso. En el momento que los motivamos y establecimos una meta, vimos a más personas dando un paso de fe”.

Sotolongo, quien también es profesor adjunto de evangelismo en Southwestern Baptist Theological Seminary, ha implementado un enfoque multifacético para el alcance, que incluye oración intencional, entrenamiento en evangelismo, participación comunitaria y el establecimiento de metas claras. Su iglesia ha adoptado estrategias como eventos de oración en la calle, evangelización en el vecindario e iniciativas de discipulado para crear una cultura de evangelismo.
Capacitación y equipamiento para la evangelización
Reconociendo que el temor a menudo detiene a los creyentes de compartir su fe, Sotolongo ha llevado a la iglesia a enfatizar la capacitación mediante herramientas simples y efectivas como el método de las “3 Círculos”, Evangelismo Explosivo y la práctica directa.
“Queremos eliminar barreras. Ofrecemos sesiones de capacitación simples, a veces de solo dos horas después de los servicios dominicales, con una comida incluida”, explicó. “La meta es equipar a más personas para que compartan el evangelio con confianza”.
La iglesia también ha adoptado un método único para reportar las conversaciones de evangelismo. En lugar de requerir informes detallados, la iglesia cuenta con un sistema en el que los miembros simplemente envían un mensaje de texto a un número designado diciendo: “Compartí a Cristo con alguien hoy” o “Alguien aceptó a Cristo hoy”. Estas cifras semanales luego se muestran en un tablero de la iglesia y se comparten con la congregación.
“Cuando la gente ve esos números, se anima”, dijo Sotolongo. “Crea impulso, y la gente quiere ser parte de ello”.
La intencionalidad del liderazgo de la iglesia producirá resultados que impactan el reino.
“Iglesia Bautista Estrella de Belén, bajo el liderazgo del pastor Javier Sotolongo, apuntó a compartir el evangelio con su comunidad inmediata de la ciudad de Hialeah”, dijo Al Fernandez, catalizador regional del Sureste de la Convención Bautista de Florida. “El resultado fue que lograron su meta de bautismos. Esto es un testimonio de que la intencionalidad del liderazgo de la iglesia produce resultados que impactan el reino”.
Alcance comunitario y bautismos
“Es inspirador ver la intencionalidad de una iglesia cumpliendo la Gran Comisión a través de esfuerzos evangelísticos”, dijo Emanuel Roque, catalizador hispano multicultural de los Bautistas de Florida. “Dios ha usado al pastor Javier Sotolongo a lo largo de los años para liderar una iglesia saludable y efectiva por medio de este compromiso con la centralidad y la prioridad real del evangelio, tanto en el mensaje como en la acción”.
El compromiso de la iglesia con la evangelización se extiende más allá de las paredes del edificio. Los miembros salen regularmente a las calles ofreciendo oración e invitaciones a los servicios de la iglesia. Este alcance ha llevado a encuentros con personas sin hogar, inmigrantes y gente de diversos orígenes, algunos de los cuales han comenzado a asistir a los servicios.
El impacto de estos esfuerzos se hace evidente en los servicios de bautismo. En un servicio reciente, se incluyó a un joven con autismo que, tras completar las clases de bautismo, profesó su fe con confianza. Aunque inicialmente dudoso ante el agua, finalmente fue bautizado de una manera que se ajustó a su nivel de comodidad.
“Esto nos mostró que el evangelio es para todos y que necesitamos ser flexibles en la forma en que ministramos a la gente”, reflexionó Sotolongo.
La iglesia también da prioridad a celebrar los bautismos públicamente, a menudo realizando los servicios de bautismo al aire libre, donde los autos que pasan pueden ser testigos de la alegre ocasión.
Una misión en crecimiento
Nuestra iglesia se ha convertido en un lugar donde la gente espera que Dios obre. Y cuando lo esperas, empiezas a ver que sucede.
En 2024, la iglesia se propuso la meta de compartir el evangelio con 1,000 personas, superándola al llegar a 1,040 individuos, lo que resultó en 272 profesiones de fe y 30 bautismos. Para 2025, la meta es aún mayor: 300 profesiones de fe y 50 bautismos.
Sotolongo anima a otras iglesias a dar pasos hacia una cultura de evangelismo, sin importar cuán pequeños sean.
“Empiecen con la oración—menos por la artritis y más por las almas perdidas”, dijo con una sonrisa. “Capaciten a su gente; salgan a la comunidad y déjenles saber que su iglesia está ahí para servir”.
Para Sotolongo, la evangelización es más que un programa—es el latido del corazón de la iglesia.
“Nuestra iglesia se ha convertido en un lugar donde la gente espera que Dios obre”, dijo. “Y cuando lo esperas, empiezas a ver que sucede”.